Los Laowa Proteus 2x Anamorphic Zoom es la prueba de que, en el mundo del cine, no todo tiene que ser un ejercicio de halterofilia. Porque seamos sinceros, cualquiera que haya trabajado con zooms anamórficos sabe que suelen ser más grandes que la propia cámara, pesan como un yunque y requieren media vida para equilibrarlos en un rig. Si además buscas un squeeze 2x, prepárate para que tu ayudante de cámara empiece a considerar una carrera en fisioterapia.
Laowa ha decidido que ya era hora de ponerle fin a tanto sufrimiento con los Proteus 2x Anamorphic Zoom, una serie de ópticas diseñadas para Super35 que prometen toda la magia del anamórfico sin necesidad de un exoesqueleto para manejarlas. ¿La clave? Dos zooms compactos y relativamente ligeros, que cubren desde 26mm hasta 85mm, con apertura constante T2.9, diseño parfocal y ese desenfoque ovalado que tanto gusta en los círculos más cinéfilos.
Sobre el papel suena estupendo, pero la gran pregunta es: ¿realmente cumplen con lo que prometen? Todo apunta a que sí. Con un diseño compacto, prestaciones profesionales y ese look cinematográfico que tanto gusta, los Laowa Proteus 2x Anamorphic Zoom son una opción muy interesante para quienes buscan incorporar el anamórfico a su flujo de trabajo sin complicaciones innecesarias.
Dos rangos de zoom para dominarlos a todos
La serie Laowa Proteus 2x está compuesta por dos objetivos:
- 26-45mm T2.9, pensado para planos abiertos y tomas ambientales.
- 45-85mm T2.9, ideal para retratos, planos medios y detalles más cerrados.
Juntos, ofrecen un rango de zoom de 3,27x, algo bastante poco común en lentes anamórficas, que suelen ser fijas o tener zooms limitados. Esto no solo reduce el número de ópticas necesarias en un rodaje, sino que permite hacer ajustes de encuadre sobre la marcha sin necesidad de cambiar de lente.
Otro punto clave es que son parfocales, lo que significa que el enfoque no cambia al hacer zoom. Esto es esencial en cine y publicidad, donde un enfoque preciso es clave para mantener la continuidad de la escena. Y no, no es algo tan común en ópticas anamórficas con zoom, así que punto a favor de Laowa.
Si hablamos de diseño, aquí es donde Laowa ha hecho una apuesta fuerte. Los Proteus 2x han sido diseñados pensando en la portabilidad, algo que no suele ir de la mano con los zooms anamórficos.
- Peso medio de 1,5 kg. Si bien no es una pluma, sigue siendo muchísimo más liviano que la mayoría de competidores, que rondan los 5 kg.
- Longitud de 19 cm, lo que facilita su montaje en rigs compactos y gimbals.
- Monturas intercambiables: vienen con PL de serie, pero pueden cambiarse a Canon EF, RF, Sony E, Nikon Z y L-mount.
Esto permite que se puedan usar tanto en configuraciones de cine profesional como en setups más ligeros, sin necesidad de una grúa o un equipo de carga industrial para mover la cámara.
Además, su ergonomía está pensada para rodajes dinámicos, permitiendo cambios rápidos y adaptaciones sin necesidad de desmontar media producción.
¿Y la calidad de imagen? Puro cine, con extra de flares
Si hay algo que define a un buen objetivo anamórfico es su capacidad para crear imágenes con personalidad, y en este sentido, los Laowa Proteus 2x no decepcionan. Desde el primer fotograma, se nota que estos zooms han sido diseñados para ofrecer ese look cinematográfico clásico, con el característico squeeze de 2x que alarga la imagen y genera un desenfoque natural y envolvente.
Uno de los puntos fuertes de estos objetivos es su bokeh ovalado, algo esencial en la estética anamórfica. Lejos de los desenfoques planos y predecibles de las lentes esféricas, aquí las áreas fuera de foco tienen una textura más suave y orgánica, logrando ese efecto tridimensional que hace que las imágenes parezcan cobrar vida. La transición entre las zonas enfocadas y desenfocadas es fluida, sin saltos bruscos ni cambios artificiales, lo que aporta un extra de naturalidad a cada toma.
Otro aspecto clave es el control de la distorsión, un problema habitual en ópticas anamórficas que aquí se ha mantenido a raya. No hay deformaciones exageradas en los bordes ni efectos secundarios indeseados en las líneas rectas, algo que agradecerán quienes busquen precisión en la composición sin perder la esencia anamórfica.
Pero si hay algo que a muchos les obsesiona en este tipo de ópticas, son los flares. Y aquí Laowa ha dado varias opciones para contentar a todos. Los Proteus 2x están disponibles con tres tipos de flare distintos: ámbar, azul y plateado. El primero aporta un tono cálido y más cinematográfico, ideal para narrativas clásicas o tonos nostálgicos. El azul es perfecto para ese look sci-fi que tantos directores han usado en los últimos años, con reflejos fríos que añaden dramatismo a la escena. Por otro lado, el plateado se adapta al color de la luz, ofreciendo una opción más versátil para quienes buscan algo más neutro y menos invasivo.
En conjunto, la imagen que producen estos zooms tiene ese equilibrio entre nitidez y carácter que tanto se busca en cine. No son lentes excesivamente suaves ni tampoco quirúrgicamente nítidas. Logran un punto medio interesante donde la textura cinematográfica se mantiene sin perder detalle, permitiendo trabajar tanto en proyectos puramente narrativos como en producciones de alto nivel donde la postproducción juega un papel importante.
¿A quien se recomiendan estos Laowa Proteus 2X Anamorphic?
Los Laowa Proteus 2x no son objetivos pensados para todo el mundo, y eso está claro desde el primer momento. Son ópticas diseñadas para producciones cinematográficas, videoclips, publicidad y cualquier tipo de rodaje que requiera un look anamórfico sin las complicaciones de los equipos tradicionales.
Si trabajas con cámaras de cine Super35 y buscas un zoom anamórfico que ofrezca versatilidad sin sacrificar calidad, esta serie encaja perfectamente. Su diseño compacto y relativamente ligero permite montarlos en rigs más manejables, gimbals e incluso configuraciones de cámara en mano, algo que no suele ser común en este tipo de ópticas. Esto los hace una opción interesante para producciones dinámicas, donde la movilidad es clave y no hay tiempo para lidiar con objetivos enormes y difíciles de manejar.
Además, el hecho de que sean parfocales es un punto a favor en producciones que requieren cambios de encuadre rápidos sin perder el enfoque. No tener que estar reajustando constantemente cada vez que haces zoom puede marcar la diferencia en un rodaje ágil.
Por otro lado, no hay que olvidar que son objetivos puramente cinematográficos. No son la mejor opción para quienes buscan grabar eventos, documentales o producciones donde la inmediatez es más importante que la estética. Estos zooms están pensados para quienes buscan un look cinematográfico auténtico, con todo lo que eso implica: desde la compresión anamórfica hasta los flares personalizables y el bokeh ovalado.
En definitiva, los Laowa Proteus 2x son una apuesta clara para cineastas y profesionales del vídeo que buscan un zoom anamórfico sin las limitaciones tradicionales. No son ópticas «todoterreno», pero en el escenario adecuado pueden convertirse en una herramienta creativa muy potente.
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