No todos los monitores profesionales se hacen igual. Algunos se llenan de promesas vacías y cifras que lucen bien en la caja, pero luego no sirven para gran cosa. Y otros, como los nuevos BenQ PD2730S y PD3226G, llegan sin ruido, pero con argumentos: buena conectividad, resolución nativa, un panel que no deslumbra con reflejos y ajustes pensados para que trabajar no sea una batalla constante con el sistema operativo.
Uno apunta a quienes editan, retocan y necesitan precisión sin pelearse con los menús enanos de macOS. El otro, a los que trabajan con movimiento, timelines y necesitan una pantalla con alto refresco.
BenQ ha afinado el tiro en aspectos clave: desde Thunderbolt 4, que permite unificar carga, datos y vídeo en un solo cable, hasta el nuevo recubrimiento Nano Mate, que elimina reflejos sin saturar los negros. Añádele altavoces integrados, calibración de color profesional y hasta un Puck inalámbrico para manejar los menús del monitor sin bucear en ajustes… y ya no estamos hablando de cualquier pantalla. Aquí hay intención, y se nota.
PD2730S: resolución 5K real y conexión total
Aquí va una de las novedades más interesantes: el BenQ PD2730S monta un panel de 27 pulgadas con resolución 5K (5120 x 2880 píxeles). La gracia está en que esta resolución cuadra con los estándares de Apple. Eso significa que, si conectas un Mac, se acabaron los reescalados raros, los menús borrosos o los textos microscópicos. Todo va en su sitio, a escala nativa, sin malabarismos.
En cuanto a imagen, viene bien servido: contraste 2000:1, panel IPS, recubrimiento Nano Mate para reducir reflejos sin cargarse el color, y una cobertura del 99% sRGB y 99% Rec.709 con calibración de fábrica. O sea, lo que se espera en esta liga.
Y sí, lleva Thunderbolt 4, con lo que eso implica: un solo cable para todo (imagen, datos, carga hasta 90W). Puedes incluso encadenar un segundo monitor y seguir teniendo puertos libres en el portátil. Altavoces integrados, nuevo Puck inalámbrico para controlar ajustes y un diseño que no molesta. Que ya es decir.
Especificaciones destacadas BenQ PD2730S:
- Tamaño: 27 pulgadas
- Resolución: 5120 x 2880 (5K)
- Panel: IPS, 16:9
- Contraste: 2000:1
- Refresco: 60Hz
- Cobertura de color: 99% sRGB, 99% Rec.709
- Conectividad: Thunderbolt 4, USB-C, HDMI, DisplayPort
- Potencia de carga: hasta 90W por USB-C
- Altavoces integrados
- Recubrimiento antirreflejos: Nano Mate
- Controlador: Puck inalámbrico incluido
PD3226G: más pulgadas, más hercios
Este modelo sube a las 32 pulgadas y se presenta con una tasa de refresco de 144Hz. Algo que normalmente se asocia con el mundo gaming, pero que aquí tiene todo el sentido para quienes trabajan con vídeo, animación o desarrollo visual. Ver todo más fluido es útil.
Viene con panel IPS, resolución 4K UHD (3840 x 2160) y una cobertura del 98% DCI-P3. También está calibrado de fábrica y cuenta con las mismas herramientas que el modelo anterior: recubrimiento antirreflejos Nano Mate, Thunderbolt 4, carga de 90W, altavoces y el Puck inalámbrico. Lo que cambia es el tamaño y esa suavidad extra de los 144Hz que, una vez la pruebas, cuesta dejar atrás.
Especificaciones destacadas BenQ PD3226G
- Tamaño: 31.5 pulgadas
- Resolución: 3840 x 2160 (4K UHD)
- Panel: IPS, 16:9
- Contraste: 2000:1
- Refresco: 144Hz
- Cobertura de color: 98% DCI-P3
- Conectividad: Thunderbolt 4, USB-C, HDMI, DisplayPort
- Potencia de carga: hasta 90W por USB-C
- Altavoces integrados
- Recubrimiento antirreflejos: Nano Mate
- Controlador: Puck inalámbrico incluido
Especificaciones destacadas BenQ PD3226G
El PD2730S pone sobre la mesa algo que muchos llevaban tiempo esperando sin saberlo: una pantalla que se entiende bien con tu Mac sin pedirte que elijas entre escalado, menús minúsculos o textos borrosos. Su resolución 5K encaja como un guante con macOS, y eso, en el día a día, se traduce en trabajar sin pensar en el monitor. Añádele buena reproducción de color, puertos de sobra y un diseño discreto, y tienes una herramienta que cumple sin molestar.
El PD3226G, por su parte, no se anda con sutilezas: pantalla grande, tasa de refresco alta y un panel preparado para que animación, vídeo o timelines pesados se muevan con suavidad. No es un monitor gaming disfrazado de profesional. Es un monitor profesional que ha aprendido un par de trucos de los gaming. La diferencia está en cómo mantiene la calidad de imagen mientras lo hace.
Ambos comparten ADN BenQ: calibración de fábrica, buena cobertura de color, conectividad Thunderbolt 4, Puck inalámbrico y ese enfoque práctico que no pierde tiempo en adornos. No son espectaculares a simple vista, pero cuando te sientas delante, funcionan. Y eso es justo lo que muchos necesitamos.
Precio y disponibilidad de los monitores
Ambos monitores ya se encuentran disponibles en nuestra tienda, por un precio de 1.199 euros. Así que puedes elegir cual de ellos es el que más te interesa si bien el BenQ PD2730S o bien el PD3226G con su tamaño de 32 pulgadas.
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